Pablo Palacio

¡Señora!. El contenido narrativo del cuento comienza con un inicio un tanto singular, pues inicia diciendo, este como si fuera una discusión que ocurre en ese momento y solo al escucharla totalmente es decir toda la historia se la puede entender, todo el cuento está en una escena, en la que dos personajes discuten por un robo que ocurrió convirtiéndose esto en diálogos simultáneos.
Relato de la muy sensible desgracia acaecida en la persona del joven Z. La particularidad de este relato es que su estilo narrativo es diferente, pues quien nos narra es una voz narrativa omnisciente pues además de intervenir en el relato como un amigo del protagonista este sabe todo lo que le pasa al joven z dándole a este toda la información posible, es tal su grado de información que va explicando los síntomas y el dolor. Aquí ocurre un sistema de aprobación pues cuando muere lo trata con ironía es decir la aprobación cultural dejándonos con unos personajes que suelen ser sensibles e importunos.
Una mujer y luego pollo frito. La narrativa tiene una forma particular, ocurre pues que hace como saltos de tiempo, es decir cuenta el acontecimiento que van a suceder, como cuando dice que se encontró con un amigo que luego lo golpearía o cuando dice que esa mujer tenía pies grandes, es decir hace cambios en la línea del tiempo. La desolación que se propone es tal que el final solo nos dice que todo lo que sucedió lo pensaba es decir lo imaginaba.

Por: Mauricio Cuadrado